Iniciando esta época invernal, aprovechamos para hablar de un tema muy importante y sobre el que seguramente tendrás muchas dudas,hablemos de la BRONQUIOLITIS. Esta es una enfermedad relativamente frecuente en nuestros peques, que en muchas ocasiones genera alarma y angustia en los padres, pues su tratamiento, por lo general, requiere hospitalización.
Se trata de una infección VIRAL, que se presenta frecuentemente entre los niños de 0 a 24 meses, siendo el sexto mes el de mayor ocurrencia, especialmente en aquellos niños que tienen hermanos mayores que asisten a guardería. Dentro de los agentes virales, el más frecuente es el Virus Sincitial Respiratorio, el cual produce el 80% de los casos..
Generalmente la bronquiolitis inicia con un cuadro gripal, haciendo que tu hijo presente rinorrea hialina (moquitos transparentes), fiebre leve y malestar general, puede estar más inquieto e irritable.
Luego del tercer día, pueden aparecer los siguientes síntomas:
-Tos, seca o húmeda, que va incrementando y que en ocasiones puede llevar hasta el vómito.
-Incremento de la frecuencia respiratoria(más de 50 respiraciones por minuto en menores de un año y más de 40 respiraciones en mayores de un año de edad).
-Datos de dificultad respiratoria: se le hunde el pecho y se le marcan las costillas.
-Sibilancias, (se siente silbar el pecho al respirar).
-No quiere comer o está muy somnoliento.
El diagnóstico de la enfermedad se realiza de manera clínica, con el cuadro presentado y la exploración física adecuada, las radiografías o estudios de laboratorio no son necesarios de manera rutinaria en todos los pacientes.
Recomendaciones
Las principales recomendaciones para el manejo ambulatorio son:
- Suministrar líquidos en tomas pequeñas y frecuentes.
- Ofrecer alimentos de manera habitual.
- Aseo nasal con agua tibia o solución salina para evitar la obstrucción.
- Colocar al niño en posición semisentado.
- Evitar la exposición al humo de tabaco.
- Evitar lugares concurridos.
- Mantener al niño en un ambiente tranquilo.
- Evitar el arropamiento excesivo.
- Tomar la temperatura varias veces al día.
